El encarcelamiento de la madre de un
recién nacido tiene efectos a largo plazo en el niño. El
encarcelamiento interrumpe el proceso de vinculación emocional. Los estudios
demuestran que dicha interrupción tiene efectos perjudiciales para el desarrollo
emocional, cognitivo y físico del bebé. También impide la vinculación de la
madre por completo con el niño. Este desapego emocional puede afectar
permanentemente la relación madre-hijo.
Consecuencias emocionales y
psicológicas
El trauma de una madre encarcelada
comienza con su detención y la eliminación de la casa. Los hijos de una madre
encarcelada sufren una variedad de efectos emocionales y psicológicos como el
miedo, la ansiedad, la tristeza, la depresión y la ira. Las investigaciones
demuestran que el daño psicológico y emocional tiene efectos perjudiciales en
el desarrollo de una infancia normal, tales como la disminución de las
capacidades cognitivas, las relaciones deficientes con sus compañeros, los
problemas de apego y los sentimientos generales de la incertidumbre.
Consecuencias escolares
Los niños en edad escolar tienen que
lidiar con el estigma social de tener una madre en la cárcel Esto produce un
sentimiento de vergüenza y deshonra. La madre es incapaz de participar en la
vida escolar del niño. Los niños se ven obligados a lidiar con las burlas y ser
condenados al ostracismo por sus compañeros. El alejamiento emocional de los
profesores y los compañeros de clase, la disminución del rendimiento, el
fracaso, la delincuencia escolar, la suspensión y las altas tasas de deserción
escolar son típicos de niños en edad escolar con una madre encarcelada.
Problemas de conducta
Los
hijos de madres encarceladas tienen mayor riesgo de tipos peligrosos de
conducta que pueden llevar eventualmente a su propio encarcelamiento. El
comportamiento arriesgado y peligroso incluye abuso de drogas y alcohol,
trastornos de la alimentación, la violencia y la
agresión, la promiscuidad sexual y el embarazo, los conflictos con la policía y
el comportamiento criminal.
Los niños que visitan a sus padres en prisión!!!
Personalmente he vivido episodios dramáticos en la visita de los hijos de los internos!!!
Un Domingo esperaba la salida de los niños en la última reja, para repartir les estuches de crema dental y cepillo, mas dulces..., cuando oí desde una celda de aislamiento el llanto de un bebe y una voz grotesca y destemplada que decía "Calle ese hijo de *p*/*##", el hombre quería hacerle el amor a la madre de su hijo y el llanto del bebe no lo dejaba. Y así muchas anécdotas que han producido tristeza y desesperanza para estos pequeños que visitan las cárceles, los padres no piensan que el llevar a estas criaturas a esos lugares, producen en el infante conductas negativas y sufren muchas consecuencias emocionales, psicológicas y sociales que tienen efectos perjudiciales a largo plazo sobre su desarrollo y comportamiento.
Ximena
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